Cosecha robada. Un camión ruso se carga con trigo ucraniano.
Las tropas rusas están robando equipos agrícolas y miles de toneladas de cereales de los agricultores ucranianos en las zonas que ocupan, y luego venden en Medio Oriente como si fuera ruso, según un extenso informe de la CNN. Los ucranianos temen que Moscú planee una hambruna para Ucrania, como la perpetrada por el dictador Stalin en los años 30, cuando millones murieron por el mismo procedimiento que aplican hoy las tropas rusas: robar directamente las cosechas.
El fenómeno se ha acelerado en las últimas semanas, a medida que las unidades rusas han reforzado su control sobre las ricas regiones agrícolas de las provincias de Kherson y Zaporizia en el sur de Ucrania. Desde entonces, las operaciones de siembra en muchas zonas han sido interrumpidas o abandonadas.
Las acciones de las fuerzas rusas amenazan directamente la cosecha de este año de Ucrania, uno de los países productores más importantes del mundo. Los volúmenes implicados son enormes.
Oleg Nivievskyi, especialista en agronomía de la Escuela de Economía de Kiev, dijo a CNN que en la víspera de la invasión había 6 millones de toneladas de trigo y 15 millones de toneladas de maíz listos para ser exportados, gran parte de ellos en el sur del país. El Ministerio de Defensa ucraniano estimó que hasta la fecha los rusos se han robado unas 400.000 toneladas de cereales.
Los agricultores y otras personas de Kherson y Zaporizia han proporcionado a CNN detalles de múltiples robos.
A fines de abril, soldados rusos retiraron 1.500 toneladas de granos de los silos y elevadores en el pueblo de Mala Lepetykha, en Kherson, utilizando camiones con matrículas de Crimea. Al día siguiente, esos mismos camiones _35 en total_ regresaron y vaciaron grandes silos en la cercana Novorajsk.
En Melitopol, ciudad ocupada de la región de Zaporizia y no lejana de la devastada Mariupol, el alcalde Ivan Fedorov compartió un video con CNN en el que se ven camiones, varios de ellos con el signo "Z" de los militares rusos, transportando cereal hacia Crimea. El principal elevador de la ciudad había sido vaciado.
Fedorov dijo que los rusos "recorrieron todas las aldeas, todos los patios y buscaron la maquinaria agrícola, el cereal, que posteriormente saquearon".
"Los soldados chechenos que luchan por Rusia actúan como criminales. Primero ofrecen comprar el grano a un precio ridículo. Si no aceptas, te lo quitan todo a cambio de nada. La magnitud del saqueo es sencillamente abrumadora", afirma.
El ministro de Agricultura de Ucrania, Mykola Solsky, contó que en las dos últimas semanas se había producido un aumento de los robos. Las fuerzas rusas de ocupación amenazan a los agricultores y a las empresas que si denuncian los robos, ellos y sus familias "correrán peligro".
Para los ocupantes, el cereal es una mercancía atractiva. El precio del trigo ronda los 400 dólares la tonelada en los mercados mundiales y ha subido mucho este año. Es difícil rastrear su origen y se puede enviar fácilmente.
El especialista Nivievskyi afirma que los países de Oriente Medio están encantados de comprar trigo ruso, que obtienen con un 20% de descuento, y no les importa si realmente proviene de Ucrania.
Para los ucranianos, la incautación de grano recuerda un período muy oscuro de su historia, cuando Stalin retiró por la fuerza las reservas de alimentos de los campesinos ucranianos en la década de 1930, lo que provocó la muerte de hambre de millones de ucranianos. Conocido como "Holodomor" (literalmente, "matar de hambre") es un acto de genocidio recordado por muchos ucranianos.
El jefe de la Administración Regional de Luhansk, Serhiy Hayday, afirma que ahora el objetivo de los rusos es "otro Holodomor".
Los rusos ocupan ahora cerca del 90% de las tierras de cultivo de Luhansk y se han llevado unas 100.000 toneladas de cereal de la región, según sus cálculos.
Y gran parte de lo que no han robado lo han destruido. CNN habló con Anatoliy Detochka, propietario de Golden Agro, una empresa cuyo complejo de almacenamiento de granos cerca de Rubizhne fue destruido el 14 de abril. Ardió durante dos semanas. El silo se construyó hace sólo dos años, con un costo de 5 millones de dólares. Detochka dijo que cuando fue atacado contenía unas 17.000 toneladas de trigo y unas 8.500 toneladas de semillas de girasol, por un valor total de 13 millones de dólares. Está seguro de que fue un objetivo deliberado porque no hay otros edificios en la zona. Detochka dijo que al menos otros dos silos/elevadores de la zona fueron atacados. CNN ha obtenido un vídeo de otro silo de grano bombardeado en Sylnelkove, en Dnipro.
Hayday afirma que esta primavera no se ha sembrado en Luhansk. "Para qué, si saben que les van a confiscar el grano, los agricultores pueden decir: 'Aquí están las llaves del tractor, vayan a recoger la cosecha ustedes mismos, si quieren'", agrega el ministro de Política Agraria, Solsky. Un funcionario dijo que los rusos sólo habían permitido a los agricultores sembrar en Kherson si aceptaban entregar el 70% de la cosecha "a cambio de nada. La mayoría de los agricultores se negaron".
Trofimtseva dijo que tenía historias similares de Zaporizia y Kherson. Dijo que había oído que los rusos "proponían comprar por el 10% del valor real. Y si no estás de acuerdo, te lo expropian gratis. No se trata de casos aislados. Es un sistema".
El robo de cereal a tan gran escala, combinado con la dislocación de la guerra, podría afectar a los mercados mundiales. Fedorov, el alcalde de Melitopol, dice: "Si no recogemos la próxima cosecha, el efecto del hambre puede ser importante. Y la principal vía de exportación son los puertos, que actualmente están bloqueados".
Oleg Nivievskyi, de la Escuela de Economía de Kiev, declaró que el riesgo se extiende durante años, no meses. Los agricultores están perdiendo dinero y pueden ir a la quiebra.
"Incluso si estas regiones son liberadas mañana, se necesitará tiempo para reiniciar el ciclo de producción", quizás de dos a tres años. Comprar fertilizantes y equipos y contratar trabajadores sería difícil para los agricultores que han sido "limpiados" por los rusos, "porque su cereal es su capital de trabajo para la próxima temporada".
Detochka, el propietario del silo de Rubizhne, está de acuerdo. "Trabajamos principalmente para la exportación. Los productores esperaban buenos precios, esperando la primavera, porque una parte importante de la producción de grano se vende normalmente en primavera. Hoy, casi todos los elevadores de Ucrania están llenos porque no pueden vender estos productos en ningún sitio".
CNN informó anteriormente sobre el robo de equipos agrícolas, incluyendo sembradoras y cosechadoras, de un concesionario John Deere en Melitopol. Un video y las imágenes obtenidas por la CNN muestran el equipo cargado en camiones de plataforma para un viaje de 1.126 kilómetros a Chechenia. Se ve al convoy con los equipos robados saliendo de Melitopol en marzo.
Equipo de marca John Deere robado, rumbo a Chechenia. La foto la tomó el agricultor saqueado.
Olga Trofimtseva, ex ministra de Agricultura de Ucrania, dijo que le habían informado de robos similares en Donetsk y Kharkiv. "Sus equipos fueron simplemente robados y llevados al otro lado de la frontera: tractores nuevos, cosechadoras. Por desgracia, este es su sistema".
Más al sur, Vasiliy Tsvigun, vio cómo se eliminaban décadas de trabajo de construcción de su granja en Myrne, Zaporizia. Tsvigun soportó amenazas y robos a principios de marzo, pero decidió quedarse en su granja incluso cuando las fuerzas rusas se acercaron. Cuando llegaron, "dispararon una ráfaga de ametralladora sobre mi cabeza", dijo. "Me tiraron al suelo y se llevaron nuestro generador".
Tsvigun dijo que las fuerzas rusas no tardaron en volver y lo retuvieron a punta de pistola mientras saqueaban la casa. Después de escapar a territorio controlado por los ucranianos, le informaron que habían robado todo el fertilizante, así como equipos de carga de fabricación británica. Pudo rastrear el largo viaje de uno de ellos hasta Kursk, en Rusia, utilizando el GPS.
"Se llevaron una cosechadora nueva, que nos habían entregado recientemente. Se llevaron el equipo de siembra, una máquina grande y cara. Y volcaron uno de los tractores, conduciendo borrachos. Ahora está tirado en una zanja" relató Tsvigun. En cuanto a su cereal, 2.000 toneladas, Tsvigun dijo que "lo más probable es que también se lo hayan llevado. Pero lo de las cosechadoras es un hecho". "Los rusos viven allí ahora", dijo Vasiliy sobre su granja. "Ya nadie puede ir allí. Lo que ya han robado cuesta alrededor de 2 millones de dólares. Sin contar el grano, sin contar los edificios". Tsvigun compartió fotos con CNN donde se observa parte del equipo que fue robado por las fuerzas rusas.
Con los puertos ucranianos, como el de Odessa, prácticamente cerrados, los agricultores de las zonas aún controladas por Ucrania se enfrentan a un bloqueo para la exportación de sus cereales.
Hay un rayo de esperanza. Una parte del grano se envía por ferrocarril a Rumania. A finales de abril, un carguero, el Unity N, salió del puerto rumano de Constanza, cargado con 71.000 toneladas de cereal ucraniano. CNN ha sabido que Rumania está dispuesta a hacer mejoras ferroviarias y llamó a licitación para las obras. Pero exportar cereal al resto de Europa por ferrocarril no es fácil, porque las redes ferroviarias tienen diferentes anchos de vía, lo que significa que no todos los trenes pueden circular por todas las líneas ferroviarias. Además, Rusia intensifica los ataques a los ferrocarriles, apuntando a la conexión vital de Ucrania con el mundo exterior.
Muchos agricultores ucranianos se enfrentan a un futuro sombrío, al igual que sus consumidores. En Luhansk, "no hay pan ahora ni se espera que lo haya en el futuro", dice Hayday, recordando el "Holodomor". "Los rusos dejarán a los ucranianos de los territorios ocupados al borde de la inanición". Pero Vasiliy Tsvigun, cuyos años de trabajo se han arruinado, no piensa en su granja. "Lo principal ahora es la victoria de Ucrania. Habrá una victoria: lo reconstruiremos todo".
sábado 7 de mayo de 2022
A los 29' trepó Martínez por derecha y su centro fue anticipado de derecha por Veliz que sentenció el 2-0.